martes, 4 de febrero de 2014

Con tacones y a lo loco

Pues si, solo a mi se me ocurre ponerme tacones un día como hoy, frio, oscuro, con amenaza clara de lluvia, y sobre todo, con el cuello sin poder moverlo.

Y es que me ha dado un tirón en el cuello, que podría llamarse contractura, que me impide mirar a la izquierda, a arriba, estornudar (y estoy con altos niveles de alergia), sonarme los mocos, y hasta respirar fuerte.

Me duele un montón.

El trabajo ha sido duro y la mañana larga, pero el pensar en como llegar a casa me esta volviendo loca.

Así que quiero decir que no puedo hacer más que coger un taxi. OMG!!! Pue si, además de la contractura me esta entrando una ulcera de pensar en el dinero que me van a soplar.

Hay días en que no hay que levar tacones.

jueves, 9 de enero de 2014

Los comienzos de año

Normalmente la gente cuando empieza el año intenta cambiar un montón de cosas, eso que llamamos propositos para el Año Nuevo, pero que realmente son objetivos, en su mayoría, imposibles de lograr.

Yo misma siempre me propongo dejar de comer tanto chocolate, bollo industrial y todo lo malo que me cae de la mano a la boca, y que se queda en la tripa en plan flotador.

Pero aunque cada año ese flotador se va hinchando e hinchando, nunca logro cumplir ese objetivo de Año Nuevo.

Así que este año no me he querido engañar de nuevo, y he aceptado que no puedo vivir sin bollos, si el bony y el tigretón forman parte de mi vida y me son tan necesarios como respirar. Que mi vida sin un donuts, un magdalena o una galleta de chocolate perdería parte de su sentido.

Eso si, me he propuesto no abusar.

No parece tan dificil de cumplir, verdad?

jueves, 26 de diciembre de 2013

El Teletrabajo

En enero empiezo una nueva etapa laboral, el trabajo es el mismo, pero dos de mis horas diarias las hare desde casa. Así puedo ir a recoger a mi peque y ocuparme de ella.

No queda otra.

Esto me crea muchos miedos y angustias, ya no comere con los compañeros, y me perdere muchos momentos chulos de risas.

También me perdere cosas que pasen en la oficina y que afecten a mi trabajo, porque no estaré ahí para enterarme.

Miedo a que cuenten menos conmigo.
Miedo a que miren mi trabajo con ojo más crítico.
Miedo a que me den más curro de lo normal para asegurarse de que trabajo en casa.
Miedo que lo usen de excusa en un futuro para echarme.
Miedo a no ser capaz de hacer esas dos horas.
Miedo a hacer más de dos horas.

No sé, supongo que los miedos típicos que tiene una persona en estos casos. Año Nuevo, cosas nuevas.

Y ahora que lo pienso..., miedo a qué?. Si trabajo bien no puede pasar nada malo, si sigo sieno buena compañera me seguirán teniendo en cuenta.... Y sobre todo, podré recoger a la peque, darla de merendar y ver como crece cada día más.

El Nenuco Pesadilla

En mi familia nos dividimos los regalos de los niños, son 5 y regalar todos a todos sería comprar muchos regalos a un niño y gastar mucho dinero, que no sobra precisamente.
Así que yo todos los años me encargo del regalo de mi ahijada.
Este año tras varias averiguaciones tipo: ¿Y qué has pedido en tu carta a Papá Noel y a los Reyes Magos? , para acabar preguntando a mi hermana: ¿Qué la compro?, me entere de que el regalo estrella era el Nenuco, lavar y cortar. Esta apreciación de la actividad del Nenuco, es importante, porque hay que joderse la de cosas que hace un Nenuco...
Fácil, verdad?
Pues no.
Primero me empolle el catalogo de la tienda de juguetes más cercana a mi casa. Lo encontré!!. Ya estaba todo hecho, solo tenía que ir a la tienda y comprar el muñeco. Pero cuando llegue me entere de que estaba agotado.
Mi segundo paso fue empollarme el catalogo del Carrefour. De nuevo ahí estaba, en foto, porque en Carrefour no, que me recorrí dos de punta a punta, y el Nenuco comía, paseaba, meaba, compraba, vamos que de todo menos lavarse y peinarse...
Tercero, el socorrido Toysrus, si, si, en el catalogo estaba pero en las tiendas no. Agotado.
El día antes de Nochebuena, como buena madrina que soy, me fui al Alcampo de la Vaguada, ese inmenso centro comercial en el que entras pero no sales, porque es grande de narices, y nunca llegas a la puerta por la que has entrado y por lo que no te atreves a bajar al parking, porque sabes que no encontrarás el coche. Y cual fue mi horror al comprobar que una vez más estaba agotado.
Mi regalo estrella de pronto era mi peor pesadilla.
Descubrí entre los pasillos interminables de la Vaguada una tienda Poly, mi última esperanza. Entre con el corazón en un puño, empecé a sudar frio, y a sentir un hormigueo raro en als manos. Me dirigí a paso firme a la sección Nenuco y no estaba, NO ESTABA.
Ya desesperada, pensando que la ilusión de mi niña por tener al "puto nenuco", apelativo con el que empezaba  a referirme mentalmente a él, se iba a romper. Cuando me di la vuelta, y ahí en el suelo, estaba el último ejemplar del lavar y peinar, mal colocado.
Nunca en mi vida he sentido una emoción así, parecía que salían rayos del Nenuco, y había música a mi alrededor, de esa de peli mala en la te toca un premio.
No me lo podía creer.
Comprar un regalo de navidad, por fácil que parezca al principio puede ser una verdadera pesadilla.
Creo que sin duda en mis 35 años, este ha sido el regalo más difícil de mi vida.
¿Si mereció la pena la búsqueda? Pues si, mi peque estaba super feliz.

martes, 15 de octubre de 2013

Se Acerca el Invierno


Pues sí, aparte de ser una frase mítica de Juegos de Tronos (que grandes libros, que gran serie), en estos días se convierte en una gran verdad.
Una verdad que desgraciadamente forma parte de mi realidad, esa de la que tantas veces intento huir.
Llego a trabajar de noche, a las 7.45 ya estoy en la oficina, como alma en pena, y salgo de día, pero como se acerca el invierno, en unas semanas dejare de ver la luz del sol!!!.  Saldré en la más absoluta oscuridad.
Bueno, siempre está la opción de mirar por la ventana, porque de asomarse nada, que desde una planta 47 lo tengo difícil. Ni esa opción me queda.
Y cuando el invierno se acerca todo va mal. Pierdes el sol, pierdes horas al día, pierdes ver a tus hijos (mi niña soñada), y encima hasta que llega de verdad no sabes que ponerte.
Que si por la mañana hace frio, que si luego calor, que si un abrigo es pasarse, que si con una chaqueta te hielas, el estrés que me produce el armario es proporcional al horror que le tengo al invierno.
Bueno, al menos en mi cabeza puedo imaginar que es primavera.

viernes, 14 de junio de 2013

El paso del tiempo

¡Qué verguenza!! No tengo perdón ninguno, abandonar así un proyecto durante un año, por que si. Sin ninguna razón aparente.
El otro día al entrar en el blog de mi hermana y ver que tiene mi blog en su lista me he sentido faltal. Ella publicitandome y yo sin escribir. Ya me vale.
Pero estoy decidida a cambiarlo.

Bueno, me decidi hace unos días, pero he tardado siglos en recuperar mi cuenta gmail, olvidada en mi el rincón más oculto de mi cerebro. Pero ya esta. Ya la tengo.

Ahora recordar que escribir me divierte, y que compartirlo es genial.

Aqui dejo una pequeña reflexión que me llego con todo esto.

El paso del tiempo hace estragos en todos los sentidos y caminos posibles. No me refiero solo a la edad, que es lo más obvio en lo que todos pensamos al oír esto, sino también en todos nuestros planes y proyectos.
Quien no ha dejado cosas sin hacer, proyectos sin desarrollar, sueños sin realizar, pensando en el tiempo que tenía por delante.
Hasta que chocamos con la dura realidad, nos damos cuenta de que el tiempo ha pasado y que todas esas cosas que habíamos una vez planificado para el futuro ya no pueden realizarse en nuestro presente.
Porque a veces el paso del tiempo es implacable.

miércoles, 25 de abril de 2012

CURSOS GRATUITOS

Hay que ver como son las cosas, o todos o ninguno. Tras mandar muchos cursos gratuitos para desempleados la esperanza de conseguir alguno que me gustara se iba apagando poco a poco. 
Por fin me dieron uno, que ilusión!!!, no sabía muy bien de que iba, pero que alegría!!!. No era el que más me gustaba, más bien al contrario, pero ya tenía uno!!!
A dos días de empezar me han llamado del segundo en mi lista de preferencias. Claro esta he rechazado el primero, no puedo con los dos.
Ahora mi imaginación vuela con el viento, ya esta, lo encontré, esto me sacara del paro (ves como tengo demasiada imaginación). Afronto con felicidad este nuevo curso que se unirá a una larga lista en mi currículo, quien sabe quizás este si que sirva para algo... 


Mi aportación a los perdidos.